Esta obra de ingeniería, declarada Bien de Interés Cultural, nos ofrece un entorno natural donde podemos disfrutar de numerosas especies animales. Podemos recorrerlo en barco, piragua, bicicleta o practicando senderismo por sus márgenes.
Junto a la dársena se encuentra una antigua fábrica de harinas del siglo XIX, que no podemos dejar de visitar.