No hace falta ninguna excusa para organizar una escapada romántica con nuestra pareja y disfrutar de unos días inolvidables con una de las personas más importantes de nuestra vida. Cualquier fecha es buena, y tampoco hace falta recorrer grandes distancias para encontrar nuestro rinconcito para desconectar y pasar unos días de asueto. A continuación os proponemos 5 interesantes propuestas en la localidad de Frías, un pequeño y pintoresco municipio del norte de Burgos que emana romanticismo por todas sus esquinas.
Pese a contar solo con 300 habitantes, Frías ostenta la categoría de ciudad, convirtiéndose así en la ciudad más pequeña de España. Está situada en una elevación cercana al río Ebro, lo que convirtió a la ciudad en un enclave estratégico durante la época romana y la Edad Media, permitiendo así el progreso de una localidad con una interesante cultura e historia detrás. A solo 100 km. de Burgos, su esplendor medieval todavía sigue patente en puntos como el lavadero o nuestra primera parada, el Puente Medieval.
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1. Puente Medieval de Frías
Aunque en realidad este puente sobre el Ebro data de la época romana, se reconstruyó en la Edad Media y se ha conservado hasta nuestro días. Lo cruza la calzada romana que unía Castilla con los puertos del Cantábrico, y es uno de los mejores ejemplos de puente fortificado que quedan en pie. Mide 113 metros de largo, y cuenta con 9 arcos. La torre de la base central también es medieval. Al lado del puente hay un merendero en el que podemos aprovechar para comer junto al puente, y si el tiempo acompaña quizá deberíais llevar el bañador con vosotros.
2. El Castillo de Frías
Uno de los culpables de este aire medieval de Frías es la presencia del Castillo en un extremo de la peña que domina el Valle de Tobalina. Aunque data del siglo X, no fue hasta 1201 cuando ganó peso gracias al valor estratégico que le concedió Alfonso VIII. Ese año se inició la construcción de la muralla que completa la protección del castillo, y ya en el siglo XV se pusieron en marcha las obras de fortificación que aseguraban la protección de Frías.
El último reducto de las defensas de la ciudad es la Torre del Homenaje, símbolo de la ciudad en toda España. Para acceder al castillo había que superar el puente levadizo y la torre-puerta equipada con una buhedera desde la que se podían lanzar proyectiles a los atacantes; y finalmente se llagaba al patio de armas. De la zona residencial, en el lado sur, llama la atención lo bien conservados que están los capiteles románicos de los siglos XII y XIII, donde caballeros y personajes mitológicos comparten el protagonismo.
3. Las Casas Colgadas
Otro de los iconos de la ciudad son las casas de toba y madera que aprovechan el poco espacio que ofrece La Muela. Da la impresión que son una parte más del precipicio, y son un excelente ejemplo de urbanismo adaptado al terreno. De hecho, muchas casas también se desarrollan hacia abajo, excavando la roca de toba, lo que permite unas casas que superan el estándar de dos pisos. El mejor punto para disfrutar de estas vertiginosas Casas Colgadas es el acceso a Frías por el lado sur de la localidad.
4. La Cascada del Río Molinar
No solo el Ebro baña Frías, el Río Molinar desemboca en el Ebro entre Frías y Tobera; y podemos hacer una espectacular ruta que en menos de 30 minutos nos llevará junto al río, superando saltos de agua, hoces, gargantas o el icónico puente románico sobre el Río Molinar. Durante el recorrido pasaremos por diferentes miradores donde podemos disfrutar de la espectacularidad del paisaje y de las mejores vistas de los saltos de agua.
5. Parque Natural de Montes Obarenes
Acabamos nuestra escapada a Frías con un agradable paseo en pareja por los Montes Obarenses, ya en la frontera con Álava, a muy poca distancia de la ciudad. El Parque Natural cuenta con hasta 22 senderos, de diferentes dificultades y distancias -de los 4 a los 15 km.- que nos permiten descubrir una de las últimas estribaciones de la Cordillera Cantábrica. Es una zona de gran riqueza ambiental, con especies como el visón europeo o el águila-azor perdicera, además de otras aves que pasan aquí el invierno.
